¡NO LO ENTIENDO!

Por: Rodolfo “POSITIVO”

Los espectadores taurinos siempre han estado regidos por un reglamento válido para todo el territorio nacional, y que cuando se ha considerado oportuno el cambiar algunas normas para educarlos al tiempo presente se han hecho y aquí no ha pasado nada.

      

Con las modas impuestas por las comunidades autónomas de tener el suyo propio, lo único que puede conseguir es confundir al aficionado cuando asista como espectador a otra región. Creo que es importante que la Fiesta esté regida por unas normas únicas y válidas para todos. ¿Qué pasaría si a cada comunidad le diese por cambiar las reglas de un juego en el fútbol? Pues que lo que en una fuese penalti, en otra sería fuera de juego ¡Vaya desastre!

                

Además, ¿Cambia el comportamiento del toro según la plaza en que sea lidiado? y ¿la personalidad de los toreros es distinta según en la región en la que actúen? No atropellemos el sentido común y dejemos las cosas como está; y no crean los mandamases que por aceptar el reglamento aprobado por todos va a restar protagonismo a su comunidad.

En cuanto a lo referente a la asistencia de menores de 12 años a las corridas de toros considero lacerante la prohibición que se pretende llevar a cabo en  algunas provincias de nuestro país, al no permitirles la entrada si no van acompañados de sus padres o tutores. ¿Cuántos padres pagan la entrada a su hijo para que vaya solo al no poderle acompañar?

La potestad sobre el menor corresponde a aquellos que le tienen a su cargo, y el negarle la asistencia a los festejos es inmiscuirse en asuntos que no les competen. Siempre que no se atropelle los derechos a los menores. 

                       

Hay algunos políticos que apoyan el espectáculo y subvencionan Escuelas Taurinas en sus Municipios, casi la totalidad de los que asisten son menores, otros en cambio se dedican a dictar prohibiciones.

Acaso, ¿son distintos los menores según el lugar de residencia? Zapatero a tus zapatos -sin doble sentido- y dejen que sean la gente del toro quienes confeccionen sus reglamentos y rijan el espectáculo; pues aunque parezca una blasfemia para algunos de ustedes; muchos, pero muchos que intentan dogmatizar sus pareceres sobre esto no tiene ni repajolera idea de que va la cosa.

 Señores Alcaldes, dejen de hacer políticas con referente a las corridas de toros y dedíquese a lo que de verdad saben que se que lo harán bien; y todo esto dicho con la mejor de mis intenciones y sin tratar de molestarles. La harina para quien sepa amasarla!